La hipertensión pulmonar en perros es una afección grave que afecta a muchos perros a medida que envejecen. Aunque la causa a veces es genética, también puede ser causada por una amplia variedad de enfermedades y afecciones de salud subyacentes. Debido a esto y a la posibilidad de que esta afección sea mortal si no se trata rápidamente, es importante reconocer los signos de esta enfermedad. Aprenda a qué debe estar atento y qué hacer si su perro muestra síntomas.
Presión arterial alta en los Pulmones
Hipertensión pulmonar es un término que se refiere a la presión arterial alta en los pulmones. En los perros, esto significa que la presión arterial en las arterias y capilares ubicados en los pulmones es mucho más alta de lo normal, dicen los hospitales de VCA. Esto podría deberse a un estrechamiento de las arterias y los capilares, a una obstrucción de la arteria pulmonar (la arteria principal que va del corazón a los pulmones) o a un flujo de sangre del corazón a los pulmones en una cantidad que excede lo que las arterias pueden manejar. Esto puede resultar en agrandamiento del corazón y posiblemente insuficiencia cardíaca congestiva, todo lo cual conduce a un flujo de sangre menos oxigenada a los pulmones y al resto del cuerpo.
Qué causa la hipertensión pulmonar en perros
Cualquier tipo de enfermedad cardíaca o pulmonar puede causar que se desarrolle hipertensión pulmonar en su perro, al igual que la enfermedad renal, el páncreas inflamado y los trastornos suprarrenales, como la enfermedad de Cushing. También puede ser causada por enfermedades como bronquitis, neumonía y ciertos tipos de cáncer. Una de las principales causas de esta afección en los perros son los gusanos del corazón, que subrayan la importancia de la prevención regular del gusano del corazón. Pero también es posible que sea el resultado de trastornos del desarrollo que ocurren desde el nacimiento, como un defecto cardíaco congénito. En verdad, una amplia variedad de enfermedades pueden causar que se desarrolle presión arterial alta en los pulmones de un perro. Si su perro está mostrando signos de esta condición, es importante que su veterinario examine a su perro a fondo para determinar la causa subyacente con el fin de proporcionar el tratamiento adecuado.
Signos y síntomas
La hipertensión pulmonar puede estar presente durante un tiempo antes de que aparezcan los síntomas. Una vez que lo hacen, es probable que el cuerpo de su perro ya haya estado funcionando durante un tiempo sin un suministro adecuado de oxígeno. Si esto no se trata durante demasiado tiempo, podría ser fatal. Es importante llevar a tu perro a un veterinario tan pronto como notes cualquier signo de que está luchando. Estos son los síntomas comunes a los que hay que estar atento, según Dogtime:
- Dificultad para respirar
- Respiración rápida
- Tos
- Desmayos
- Falta de conciencia o conciencia
- Escupir sangre
- Encías o piel azul o púrpura
- Cansancio extremo
- Niveles de actividad reducidos
- Rechazo o renuencia a hacer ejercicio y jugar
- Pérdida repentina de peso
- Soplo cardíaco
- Abdomen agrandado
- Venas del cuello distendidas
- Colapso
Tratamiento de la Hipertensión Pulmonar en Perros
Si su perro tiene dificultades para respirar cuando llegue al veterinario, lo más probable es que se le aplique terapia de oxígeno, lo que puede requerir hospitalización durante la noche. También recibirá medicamentos para abrir sus vías respiratorias y, si es necesario, también se le administrará un diurético para ayudar a eliminar el exceso de líquido acumulado en sus pulmones. Se determinará si la hipertensión pulmonar también ha causado insuficiencia cardíaca congestiva, y si es así, también se le administrarán medicamentos adecuados para tratarla. Es posible que tu veterinario te derive a un veterinario especializado en esta área para obtener un diagnóstico adecuado.
Además de continuar con sus medicamentos, la atención continua requerirá seguimientos regulares con el veterinario para monitorear la condición de su corazón y pulmones, y alterar sus medicamentos si es necesario. Si su cachorro continúa tomando un diurético, también puede ser necesario controlar regularmente la función renal. Se le pueden administrar antibióticos de vez en cuando para tratar cualquier infección que surja debido a su condición. En casa, si toma diuréticos, necesitará orinar con bastante frecuencia, por lo que debe estar preparado para accidentes. También deberás estar atento a cualquier signo de infección del tracto urinario, como la presencia de sangre en la orina. Es importante mantener el entorno de su perro lo más libre de estrés posible y limitar su actividad física. Consulte con su veterinario para ver cuánto ejercicio debe restringirse. También es extremadamente importante mantener a su perro alejado del aire frío, el calor excesivo, el humo del cigarrillo y cualquier otra cosa que pueda irritar sus pulmones y causar dificultades para respirar. Si es necesario, el veterinario puede recetarte un alimento para perros con receta baja en sodio.
Pronóstico
Desafortunadamente, la hipertensión pulmonar en perros es una enfermedad progresiva sin cura conocida. Es importante entender que el tratamiento está dirigido a mejorar la calidad de vida de su perro y extenderla el mayor tiempo posible. Por lo general, el pronóstico de esta afección es vigilado, lo que significa que su veterinario no puede estar seguro de qué tan bien responderá su perro al tratamiento. Algunos perros solo viven unas pocas semanas o meses después de haber sido diagnosticados con esta afección. Sin embargo, muchos perros responden bien al tratamiento y, con cuidado domiciliario diligente, viven muchos meses y, en algunos casos, años. La única certeza con esta afección es que si no se trata, será fatal.
La hipertensión pulmonar es una enfermedad grave, pero no carece de esperanza. Con el cuidado adecuado, su perro puede disfrutar de la vida y estar feliz y cómodo durante bastante tiempo con esta condición, lo que le brinda muchas oportunidades para brindarle la mejor medicina de todas: su amor.
Biografía del colaborador
Jean Marie Bauhaus
Jean Marie Bauhaus es una madre mascota, blogger de mascotas y novelista de Tulsa, Oklahoma, donde generalmente escribe bajo la supervisión de un puñado de furbabies.