La comunicación comienza con las relaciones. Es a través de interacciones sociales de ida y vuelta que todos aprendemos a comunicarnos de una manera significativa. Entonces, ¿qué hacemos cuando un niño no está aprendiendo a comunicarse de la manera típica? La intervención típica comienza con terapia del habla. Sin embargo, es un sistema de creencias anticuado que un niño necesita estar «listo» para la terapia del habla. La mayoría de los expertos que trabajan con niños con retrasos o trastornos de comunicación apoyan el enfoque de Comunicación Total.
La comunicación total es una visión holística de la comunicación que se puede usar con bebés y adultos. Implica no solo el lenguaje oral para desarrollar habilidades de comunicación, sino que introduce gestos, lenguaje de señas y otros sistemas de comunicación visual. Los terapeutas del habla que usan este enfoque piensan «fuera de la caja» para crear un sistema de comunicación que funcione para cada individuo. Por ejemplo, cuando se trabaja con un niño de un año, un logopeda puede entrenar a los padres para que jueguen juegos de balbucear para alentar la imitación de sonidos. Para un niño de dos años que aún no está usando palabras, el logopeda puede introducir el lenguaje de señas para ayudar a emparejar palabras verbales con signos para mejorar la comunicación. Si un niño está mostrando dificultades más extremas con la comunicación verbal, entonces un logopeda puede presentarlo usando un tablero de letras o un dispositivo aumentativo, para que el niño pueda escribir su comunicación. Muchos niños y adultos con autismo han compartido un mundo expresivo profundo a través del uso de un teclado o un tablero de letras. Ver http://idoinautismland.com/ o la película, Miserables & Jabberers.
A algunos padres les preocupa que el uso del lenguaje de señas o de dibujos y carteleras pueda impedir las habilidades de comunicación oral de un niño. La investigación apoya que la enseñanza del habla y otras modalidades de comunicación en conjunto aumentarán la probabilidad de que el niño hable. Esto se debe a que hablar o usar el lenguaje de signos activa la misma área del cerebro responsable de la comunicación. No hay evidencia que apoye que el uso de otros métodos de comunicación, como el lenguaje de señas, desaliente el uso del habla.
En última instancia, el objetivo es que un niño se comunique con los demás y con el mundo. Comienza con gestos y se mueve a la voz, la «voz» del niño se puede expresar de muchas maneras diferentes. Es importante que los padres y los profesionales sepan que el uso de un enfoque de Comunicación Total es el modelo de tratamiento del habla y el lenguaje más aceptado. Es nuestra responsabilidad garantizar que todos los niños tengan las herramientas necesarias para expresarse de manera eficaz.