Durante el siglo XX, hubo disputas significativas con respecto a los territorios de Acre, otro estado brasileño. El Tratado de Petrópolis fue redactado para definir las fronteras entre Bolivia y Brasil, y requería que Brasil construyera un ferrocarril que se extendiera unos 366 kilómetros. Este ferrocarril se llamaba Madeira-Mamoré. El pueblo que se construyó como hogar para los trabajadores que construían el ferrocarril crecería y se desarrollaría, convirtiéndose finalmente en la capital moderna del estado, Porto Velho. Inicialmente, Rondônia fue reconocida solo como Territorio. Sin embargo, en 1981, alcanzó la condición de Estado.
Aunque ha estado ocupada por bosques exuberantes durante siglos, Rondônia está sufriendo ahora las consecuencias de la deforestación masiva como resultado de la superpoblación y la agricultura excesiva. De hecho, Rondônia es reconocida como una de las zonas más vulnerables en términos de agotamiento de las selvas tropicales. Las áreas urbanas son los principales epicentros para los residentes del estado.
El clima de Rondônia es cálido y húmedo durante todo el año. Estas son las condiciones ideales para fomentar las densas selvas del estado, que (aunque agotadas) aún albergan una fascinante variedad de plantas y animales.
Diferentes sectores apoyan el PIB o el Producto Interior Bruto. La mayor contribución la realiza el segmento de servicios de la economía, seguido de la industria y la agricultura. La principal exportación de Rondônia es madera, pero el café y el granito también son exportaciones importantes.