Liderazgo relacional es un término relativamente nuevo en la literatura de liderazgo, y debido a esto, su significado está abierto a la interpretación. En el presente artículo describo dos perspectivas de liderazgo relacional: una perspectiva de entidad que se centra en identificar los atributos de los individuos a medida que se involucran en relaciones interpersonales, y una perspectiva relacional que ve el liderazgo como un proceso de construcción social a través del cual surgen ciertas comprensiones del liderazgo y se les da una ontología privilegiada. Estos enfoques pueden ser complementarios, pero sus implicaciones para el estudio y la práctica son bastante diferentes. Después de revisar la investigación sobre liderazgo en relación con estas dos perspectivas, ofrezco la Teoría del Liderazgo Relacional (RLT) como un marco general para el estudio del liderazgo como un proceso de influencia social a través del cual se construyen y producen la coordinación emergente (por ejemplo, el orden social en evolución) y el cambio (por ejemplo, nuevos enfoques, valores, actitudes, comportamientos e ideologías). Este marco aborda las relaciones como resultado de la investigación (por ejemplo, ¿Cómo se producen las relaciones de liderazgo?) y un contexto para la acción (por ejemplo, ¿Cómo contribuye la dinámica relacional a la estructuración?). RLT se basa en ontologías y metodologías tanto de entidad como relacionales para explorar más a fondo la dinámica relacional del liderazgo y la organización.